El otoño comienza y llegan las primeras lluvias a Tenerife. Es entonces cuando no pocos conductores recuerdan que quizás sea conveniente el cambio de neumáticos. Hoy vamos a explicar por qué debes tener unas ruedas en condiciones desde que empiezan a caer las primeras gotas, no solo para no tener inconvenientes en la inspección técnica de tu vehículo sino por tu seguridad, por la seguridad de quienes te acompañan y por la seguridad del resto de usuarios de la vía pública.
Si el asfalto está mojado, sobre todo en las primeras lluvias, y las cubiertas de tus ruedas presentan una superficie ya desgastada, el riesgo de accidente por deslizamiento o, como habitualmente se le llama, aquaplaning, se dispara.
En un test realizado por Auto Bild encontraron que de 60 vehículos revisados de manera aleatoria en una estación de servicio, al menos el 15% no presentaba el perfil mínimo prescrito de 1,6 milímetros. Esto no solo expone a sus conductores a sanciones que pueden llegar hasta los 300 euros de multa sino que nos indica que un alto porcentaje de vehículos circula incumpliendo unos márgenes de seguridad mínimos que multiplican el riesgo de accidente cuando llueve.
A 120 km/h un neumático con una profundidad inferior a 1,6 milímetros incrementa la distancia de frenado unos 34 metros, es decir, una distancia equivalente a 8 ó 9 turismos de tamaño medio puestos uno detrás de otro. Si hablamos de fuertes lluvias esta distancia se alarga más del doble. Si el neumático de tu coche presenta un notable desgaste puede volverse totalmente ingobernable a partir de tan solo 50 km/hora.
Sin embargo, si eres del porcentaje de conductores que sí se preocupa por sus ruedas entonces la parte que te toca son la precaución y la prudencia.
- Ojo con los firmes deslizantes, habitualmente señalizados en carretera y que, además, suelen llevar implícitos unas limitaciones de velocidad. Cumple a rajatabla esos límites, no sobrepasándolos en ningún caso.
- Permanece vigilante al tipo de calzada, especialmente en tramos donde se pueda acumular agua, curvas con caídas laterales o baches que pueden quedar ocultos al quedar encharcados. En los días de lluvias torrenciales ojo con las alcantarillas que pierden sus tapas.
- Si estás en el momento de cambiar neumáticos busca los más óptimos para lluvia, con surcos más profundos y anchos que facilitan la evacuación del agua.
- En general, reduce la velocidad y aumenta la distancia de seguridad más allá de lo exigido o recomendado por la señalética que veas en la vía pública.